Estrellas moribundas

Muerte de una estrella en un laboratorio

Todos los días no está uno preparado para escuchar la charla de un físico sobre la muerte de una estrella en un laboratorio. Pero me vuelvo a animar con mi hija y me adentro en el mundo de la astrofísica. La verdad es que me gustaría saber por qué en la sala son todo hombres. Apenas tres o cuatro mujeres además de mi hija adolescente y servidora. Siempre tengo la sensación de ser una impostora en estas citas de los martes, pero la verdad es que el tema de hoy ha resultado tener algún punto del que se puede sacar alguna molécula filosófica.

Y se presenta el ponente, con cierto aire “einsteiniano”. Me surge siempre la duda de por qué hay profesiones que requieren cierta compostura, en el caso de los grandes científicos, deben estar despeinados sí o sí. Pues el ponente de hoy no ha visto un peine en dos años luz.* Se ha presentado como el 'Presidente de la asociación española del vacío". Joderhay asociaciones para todo, hasta para el vacío. Y entonces ha comenzado a hablar del nanocosmos, un palabro que en sí mismo no abarca. O lo abarca todo, de lo mínimo a lo máximo. Y nos dice que él estudia los granos de polvo intelestelar. ¿Pero no era el cherif del vacío?. ¿Y no me dijeron el otro día que el vacío no existe?

Pues no. El problema es que todos creemos que el Universo está lleno de cosas, o sea, que hay cosas, pero no tantas, lo que pasa es que están muy lejos unas de las otras. Y lo que hay, tiende a concentrarse y formar constelaciones y planetas. De hecho, hay aproximadamente un átomo de hidrógeno por cada cuatro metros cúbicos. El Universo en realidad está vacío. Y por eso se crean grandes vacíos. Vamos como en la vida misma. El mundo está lleno de gente, pero insistimos en agrandar las distancias hasta que solo podamos ver vacíos o grandes concentraciones.

Ha hablado de máquinas de generar vacío, “lo que hacía falta", he pensado, "como si no hubiera en la vida vacíos difíciles de llenar como para inventar máquinas que lo generen". De modo que estas máquinas recrean un mundo de ultra alto vacío. Alucinante.

Y al final se ha centrado en el tema de la ponencia en sí, de estrellas moribundas, que son las gigantes rojas y supernovas. No me han parecido nombres de entes moribundos, y es que tardan años luz en morirse, así sí que mola morirse, si tardas tanto tienes hasta ganas de que llegue el final. Y mientras se mueren van soltando lastre en forma de polvo interlestelar.

En fin, que empiezo a mimetizarme con el tema y a sentirme una partícula de polvo minúscula dentro del vacío, cuando ha empezado explicar el comportamiento estas moléculas. Y dice que la vida se autoorganiza para colocarse de una manera determinada. Que las moléculas se reconocen y se organizan montando hiperestructuras. Y ha terminado contando la complejidad química en el espacio de la Tierra. 


Demasiado para un martes en el que me siento tan pequeña. Para un martes en el que el mundo me queda grande. Para un martes en el que el vacío duele. Para un martes en el que ves cómo la materia se concentra en lugares en los que tú no estás.

* Mi hija, que es la que sabe, me riñe porque no puedo medir el tiempo en años luz.



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